La túnica sagrada, cine religioso de otra época.

He vuelto a ver tras muchísimos años La Túnica Sagrada (The Robe, 1953) de Henry Koster. La película ha pasado a la historia por ser la primera película estrenada en CinemaScope (de hecho Cómo casarse con un millonario se rodó antes pero se estrenó más tarde).

Sinopsis: La vida de Marcelo Gallo (Richard Burton) cambiará para siempre el día que tenga que supervisar la crucifixión de Jesucristo y gane su túnica en una apuesta.

Dejando a un lado su estupenda fotografía (obra de Leon Shamroy) y su importancia histórica que no deja de ser anecdótica, la película es entretenida y mantiene en todo momento la emoción sobre los destinos de los protagonistas. Además la interpretación de Burton nos hace creíble el personaje principal, uno de los retos de la película. En cuanto a los demás, Victor Mature pone la cara de siempre y Jean Simmons le aguanta el tipo a Burton, que no es poco.

El problema actual de la película es que hoy en día resulta difícil sentirse emocionado por una historia tan llena de fervor católico como ésta. Ver a algunos de los personajes morir con una alegría propia de una excursión por el campo no deja de resultar chirriante. Todo esto le da un aire algo infantil al conjunto de la película. A cambio vemos una de las representaciones más duras de la crucifixión de Jesús aunque, evidentemente, sin llegar a los extremos de La Pasión de Cristo de Mel Gibson (una joya de película, por cierto).

La película ganó los oscars de Dirección Artística y Vestuario. Estuvo nominada a mejor película, fotografía y actor principal. Aquel fue el año de De Aquí a la Eternidad.

Valoración final: 6 sobre 10.